Tres estados donde pasará el Tren maya experimentaron una apreciación de la vivienda por arriba del promedio a nivel nacional, según un informe de BBVA
El precio de las viviendas ha aumentado en los estados donde se realizan los megaproyectos de infraestructura del gobierno federal, particularmente en el caso del Tren Maya. Según el informe Situación inmobiliaria México, primer semestre 2022, de la institución financiera BBVA, el máximo incremento en el país fue en Quintana Roo, donde las viviendas se apreciaron un 10.1 por ciento.
Dicho incremento se dio entre 2019 y 2021, período en el que, a nivel nacional, la apreciación de las viviendas fue de 7.14%. En relación al promedio nacional, 16 estados incrementaron sus precios por arriba de esta media y 16, por debajo. Según el reporte de BBVA, la diferencia entre los precios estatales se relaciona con las oportunidades de empleo y la aceleración económica de cada zona.
En este sentido, el costo de la vivienda en Chiapas y Tabasco, donde también se construye el Tren Maya, se apreció un 6.5% y 6% respectivamente. En otros estados donde transitará este megaproyecto, como Campeche y Yucatán, el incremento fue cercano al 8%.
Según el Índice de precios de la vivienda, de la Sociedad Hipotecaria Federal, el precio promedio de a nivel nacional fue de 1 millón 372 mil pesos, al cierre de 2021. En el caso de las entidades del Tren Maya, el precio medio de la vivienda en este período fue de alrededor de 1 millón 379 mil pesos en Quintana Roo. En Tabasco, de 1 millón 137 mil; en Yucatán, 1, 294,587; en Campeche, 1,055,691 y en Chiapas, 1,043,836.
Con el Tren Maya, el gobierno federal plantea mejorar la calidad de vida de las personas, cuidar el medio ambiente y detonar el desarrollo sustentable de la región. En esta región habitan 7.3 millones de personas en pobreza y 30% de ellas se encuentra en situación de pobreza extrema. Además, de entre los estados que albergarán este proyecto de infraestructura, destaca Tabasco, con una tasa de desempleo de 6.2%, la más alta a nivel nacional, según las autoridades.
Para combatir esta situación, el Tren Maya promete la generación de empleos para cientos de miles de personas de la región. Sin embargo, activistas medioambientales advierten de los posibles efectos adversos de la obra en términos sociales y del medio ambiente, particularmente en torno al tramo cinco. En específico, la organización no gubernamental Greenpeace critica la falta de una manifestación de impacto ambiental, por lo que desconocen los posibles daños de la obra para los ecosistemas.
Las oportunidades de empleo y la aceleración económica de cada zona influyen en el costo de las viviendas, según los criterios de BBVA. En este sentido, los estados en donde se despliega el proyecto de infraestructura Tren Maya están teniendo una apreciación en sus precios inmobiliarios. Pese a las promesas de avance en materia económica y laboral, activistas subrayan la necesidad de cuidar los aspectos de impacto medioambiental en torno al proyecto.