¿Qué sectores provocaron la caída de la producción industrial mexicana en junio?

Caída de minería y construcción reduce actividad industrial en el país

Minería, construcción y servicios públicos frenaron la producción industrial en México en junio, sorprendiendo al mercado con una caída inesperada

Tres sectores estratégicos para la economía mexicana —minería, construcción y servicios públicos— fueron los responsables de la caída de 0,1 % en la producción industrial durante junio. La cifra sorprendió al consenso de mercado, el cual anticipaba un avance de 0,3 %.

De acuerdo con Felipe Barragán, estratega de investigación de mercados en Pepperstone, "la debilidad se concentró en minería, construcción y servicios públicos y estuvo parcialmente contrarrestada por un leve repunte de 0,3 % en la producción manufacturera".

En el caso del sector minero, se registran al menos cinco meses consecutivos de retrocesos en términos anualizados. Este comportamiento está vinculado al menor volumen de extracción de petróleo, afectando el desempeño general de la actividad extractiva.

Por su parte, la construcción presentó un panorama de bajo dinamismo, evidenciado en la disminución de proyectos y una menor generación de infraestructura. A su vez, los servicios públicos mostraron resultados negativos, reflejando problemas en la distribución energética y limitaciones en el suministro a diversas industrias.

"El dato confirma la fragilidad de la economía, por cuanto sectores como la minería acumulan ya al menos cinco meses de caídas consecutivas en términos anualizados, reflejando el deterioro de la producción de petróleo", indicó Barragán en el reporte compartido a NotiPress.

Igualmente, el análisis, emitido el 11 de agosto de 2025, también advierte sobre un entorno adverso para el crecimiento económico. "Hacia adelante, el balance de riesgos sigue inclinado a la baja", precisó el estratega, enumerando factores que presionan el desempeño: proceso de consolidación fiscal por parte de la administración de Claudia Sheinbaum, tasas de interés en niveles elevados, incrementos en costos operativos, debilidad en la confianza empresarial y fricciones comerciales con Estados Unidos.

Si bien el ligero aumento de 0,3 % en manufactura compensó parcialmente la contracción de otros sectores, el resultado global del mes refleja un desafío para la industria nacional. El informe subraya que las actividades secundarias dependen de condiciones internas estables y de una relación comercial fluida con socios estratégicos.

Los datos de junio revelan que los motores productivos no avanzan de manera uniforme. Las ramas con mayor peso en la economía requieren incentivos y condiciones propicias para recuperar el terreno perdido. El desempeño de la minería continúa condicionado por variables internacionales del mercado energético, mientras la construcción depende de la inversión pública y privada. En tanto, los servicios públicos permanecen sujetos a la capacidad de respuesta de las redes de distribución y mantenimiento de infraestructura.

Finalmente, el panorama descrito por Barragán sugiere que los sectores con desempeños negativos tienen un impacto significativo en la cifra agregada de producción industrial. Aunque manufactura registró un leve crecimiento, no fue suficiente para revertir la tendencia mensual de retroceso, lo que coloca en evidencia la dependencia de la economía respecto a un conjunto diversificado de actividades.