Foto: X @Ejercito_Div3
A través de un comunicado, el gobierno del Valle de Cauca relacionó los hechos violentos acontecidos en el municipio de Tuluá con la captura del líder del grupo delictivo La Inmaculada. "El ataque del cual fue escenario Tuluá, es atribuido a retaliaciones de la banda La Inmaculada, tras la captura de Mauricio Marín Silva, cabecilla de esta y de su hermano", se lee en el documento.
El documento también establece una bolsa de recompensa por 200 millones de pesos colombianos para quien proporcione información y denuncie hechos relacionados con dicho grupo delictivo. A su vez, se comunica, el toque de queda, realizado en colaboración con un batallón de fuerzas especiales urbanas, se mantendrá hasta el 12 de febrero de 2024.
Por otra parte, el alcalde de Tuluá, Gustavo Vélez, realizó algunas declaraciones al respecto, en entrevista para Radio Nacional CO. "El crecimiento de la inseguridad en el municipio se debe a que administraciones anteriores, dejaron acrecentar el poder e influencia del grupo en la zona". De acuerdo con lo descrito por el alcalde, el grupo pasó de operaciones relacionadas con microtráfico de drogas a extorsión, secuestro y manejo de bares, restaurantes, clubes nocturnos y ambulancias.
De este modo, aseguró que las administraciones anteriores fueron permisivas en torno a la extorsión a comerciantes y empresarios. Con lo cual adquirieron capital para expandir sus operaciones y tener influencia, incluso al interior de cárceles, desde donde se manejó el cobro y sicariato.
Veléz, considera, La inmaculada está buscando "chantajear" al gobierno para acceder a un diálogo, dado que ya no tienen el mismo amparo y condiciones de protección otorgadas por gobiernos anteriores. Muestra de ello sería la captura de su líder, Mauricio Marín Silva y su hermano, de acuerdo con lo mencionado por el alcalde.
Quieren doblegar al estado, quieren continuar haciendo lo que estaban haciendo, y como no lo está logrando, apelan a ser incluido en el proceso de diálogo, para conservar lo que han logrado", destacó.
Referente con ello, el alcalde estableció no tener la facultad para entablar un diálogo con el grupo delictivo y aseguró este no conseguirá presionar al gobierno Nacional ni al del Valle de Cauca a través de la violencia.
Relacionado con ello, Lilian Francisco del Toro, gobernadora del Valle de Cauca, solicitó a la Fiscalía de Justicia intervenir para neutralizar las acciones realizadas por La inmaculada desde el interior de centros de detención. Por su parte, La inmaculada, a través de un mensaje difundido por medios de comunicación, aseguraron, no cesarán los actos delictivos hasta que se libere a su líder. "Les pedimos disculpas a toda la población por los hechos que están aconteciendo, peso es culpa del gobierno nacional y del director del Inpec, quienes están haciéndole caso a Gustavo Vélez. El grupo delictivo considera, la captura de Marín como una trampa, elaborada por el gobierno local y nacional, en un intento por oprimir el derecho a la libertad.
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