Foto: Sergio F Cara (NotiPress)
En México, la inflación disminuyó por segundo mes consecutivo, ubicándose en 4.58% en septiembre de 2024, según el análisis de Quasar Elizundia, experto en estrategia de investigación de mercados en Pepperstone. Este descenso representa un alivio para el Banco de México (Banxico), que ha enfrentado presiones inflacionarias y volatilidad cambiaria durante la primera mitad del año. La cifra de septiembre, la más baja desde marzo, supera las expectativas del mercado, que proyectaban un 4.62%.
Asimismo, los precios de alimentos y bebidas no alcohólicas, en particular frutas y verduras, han contribuido significativamente a esta desaceleración Esto junto con una baja en los precios de los servicios públicos y el transporte. En comparación, la inflación anual en agosto se ubicó en 4.99%, lo que destaca la importancia de esta tendencia a la baja.
La inflación subyacente, que excluye los precios más volátiles y es crucial para la política monetaria del Banxico, también mostró una caída significativa. Se ubicó en 3.91% en septiembre, su nivel más bajo desde febrero de 2021. Esto refuerza la posibilidad de que el banco central continúe con una política de normalización.
A pesar de los avances, Banxico solo ha recortado su tasa de interés de referencia en tres ocasiones durante 2024, contrastando con los enfoques más agresivos de otros bancos centrales de la región, como Chile y Colombia. La volatilidad del peso y la incertidumbre en el entorno internacional, especialmente ante las elecciones presidenciales en Estados Unidos, siguen siendo factores clave que podrían afectar las decisiones del banco central en los próximos meses.
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