Foto: NOAA
El huracán categoría cuatro; Ida, impactó en el sur Estados Unidos desde el 29 de agosto de 2021, afectando a estados como Misisipi y Luisiana; en este último dejó a más de un millón de personas sin electricidad en la ciudad de Nueva Orleans. Asimismo, el huracán, quien recientemente ha sido renombrado como tormenta tropical, ha ocasionado fuertes lluvias, graves inundaciones y daños materiales severos al tocar tierra.
Los residentes de Luisiana podrían estar a oscuras durante días mientras las autoridades evalúan los daños provocados por el huracán que impactó con vientos de 240 kilómetros por hora. Ante esto, expertos califican al huracán Ida como el quinto más agresivo que ha azotado en el territorio de Estados Unidos.
Autoridades locales y federales han desplegado a más cinco mil miembros de la Guardia Nacional para ayudar en la búsqueda y rescate de civiles. Además, más de 25 mil trabajadores de todo el país se han movilizado para apoyar en la restauración de energía en el estado, de acuerdo con un medio británico.
Hasta el 30 de agosto 2021 se ha registrado un fallecimiento, sin embargo, las autoridades señalan; el número podría aumentar a medida que continúen los esfuerzos de búsqueda y rescate. Por su parte, la alcaldesa de Nueva Orleans, LaToya Cantrell, instó a la población que había evacuado su hogar a no regresar hasta verse reestablecida la energía y comunicaciones. Paralelamente, aconsejó a todos aquellos quienes sí pudieron quedarse en casa, sin correr ningún tipo de riesgo, a permanecer allí y mantenerse alejados de las calles, las cuales se encuentran en condiciones muy peligrosas por los desastres ocasionados.
Mientras tanto, el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos puntualizó que a medida que Ida avanza al interior se debilita con vientos de 153 kilómetros por hora. No obstante, advirtió; las fuertes lluvias continuarían y provocarían grandes inundaciones en los estados de Misisipi, Alabama y Florida.
Ante esta situación, el presidente Joe Biden declaró que al tratarse de un desastre mayor, el ocurrido en el estado de Luisiana, se liberarían fondos adicionales para esfuerzos de rescate y recuperación. Además de prometer que el gobierno federal apoyaría monetariamente a la gente de la Costa del Golfo durante el tiempo necesario, como una forma de resarcir los daños provocados por el huracán Ida.
Es importante mencionar, al cobrar el huracán Ida fuerza sobre las aguas del Golfo de México, más del 90% de la producción petrolera se ha paralizado como resultado de la tormenta. De igual manera, existe la posibilidad de marejadas ciclónicas a lo largo de la costa, las cuales podrían alcanzar casi cinco metros, según lo reportado por expertos climatológicos.
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