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Irlanda se convirtió en el destino predilecto para estudiantes internacionales y profesionales en busca de oportunidades educativas y laborales en Europa. Según Global University Systems (GUS), esta tendencia ha sido impulsada por una combinación de factores que incluyen la salida de Reino Unido de la Unión Europea (Brexit), la accesibilidad de visados y la calidad de vida, posicionando a Irlanda como el único país de habla inglesa dentro de la eurozona.
El fenómeno de Irlanda como un atractivo centro de estudios y trabajo es resultado de su ambiente académico y laboral en constante crecimiento. El idioma inglés como lengua oficial es una ventaja competitiva frente a otros países europeos. Además, la facilidad para obtener permisos de trabajo y estudio representa una ventaja en comparación con Estados Unidos y Canadá, donde los trámites son más restrictivos.
La salida de Reino Unido de la UE dejó un vacío que Irlanda ha sabido llenar, especialmente para aquellos estudiantes que buscan una educación superior en inglés sin las complicaciones de los trámites migratorios británicos post-Brexit. Esto ha generado un auge en la matrícula de estudiantes internacionales, quienes buscan aprovechar la combinación de oportunidades académicas y laborales que el país ofrece.
Bernardo Riveros, director de Estrategia Internacional de GUS, resalta que Irlanda ofrece ventajas claras, como la posibilidad de estudiar y trabajar simultáneamente, además de contar con programas específicos que facilitan la integración de estudiantes internacionales al mercado laboral local. El reciente crecimiento en la demanda de educación superior llevó a GUS a adquirir IBAT College Dublin, una de las instituciones clave en la formación de estudiantes internacionales en el país.
Gabriela Morales, Senior Business Development Manager de IBAT College Dublin, complementa esta visión al subrayar que, además de los programas académicos de calidad, Irlanda permite a los estudiantes internacionales obtener permisos laborales que les permiten trabajar durante sus estudios y después de graduarse, facilitando la transición hacia el mundo profesional.
Sectores en auge como la tecnología, la farmacéutica y las finanzas ofrecen un mercado laboral dinámico para los graduados, quienes no solo pueden estudiar en universidades reconocidas, sino también obtener experiencia laboral en empresas multinacionales que tienen sede en Dublín. La combinación de innovación educativa y habilidades digitales impulsa a los estudiantes hacia una integración más profunda en la economía global.
Con un modelo educativo disruptivo, visados accesibles, un entorno laboral en expansión y la ventaja del inglés como idioma oficial, Irlanda se ha consolidado como el principal destino en Europa para quienes buscan una educación de calidad y una puerta de entrada a un prometedor futuro profesional.
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