Ciudad de México,
Martín Olivera
Crédito foto: Sergio F Cara (NotiPress/Composición)
Elegir entre un rol técnico o un puesto gerencial representa una encrucijada común en diversas industrias. Esta decisión implica considerar factores como las habilidades, intereses, metas a largo plazo y la satisfacción personal. La transición hacia la gestión se percibe como un paso natural en muchas trayectorias, pero no siempre es el camino ideal.
Un estudio de 2008 destacó que los ingenieros a mitad de carrera que se sentían "descarrilados" tendían a ocupar roles directivos de manera renuente y sin preparación adecuada. Este fenómeno generó insatisfacción laboral, pocas perspectivas de ascenso y una sensación reducida de eficacia en su desempeño. Estos resultados subrayan la importancia de reflexionar profundamente antes de tomar decisiones que impacten el desarrollo profesional.
El autoconocimiento es esencial para elegir el rumbo adecuado. Roni Wright, bióloga molecular y especialista en desarrollo profesional, sugiere realizar una autoevaluación que permita reflexionar sobre las habilidades, valores y estilo de trabajo. Herramientas como el Indicador de Tipos Myers-Briggs (MBTI) y las evaluaciones DISC pueden ser útiles como punto de partida, ya que "proporcionan una idea de sus patrones de conducta y estilo de toma de decisiones".
Además, muchas empresas ofrecen talleres de desarrollo profesional o recursos para facilitar este proceso. Wright enfatiza que "las carreras rara vez son lineales. Las vidas cambian, las circunstancias cambian, nosotros cambiamos y, si queremos tener éxito y ser felices, nuestras carreras cambian con nosotros".
El psicólogo vocacional Nimrod Levin recomienda buscar opiniones en un proceso reflexivo de 360 grados: "Hable con personas de confianza en todos los niveles de la organización... ¿Cómo lo ven, qué anticipan que será un desafío para usted y qué ven que sería una ventaja para usted en un rol u otro?". Esta perspectiva puede ayudar a identificar fortalezas y debilidades que no siempre son evidentes desde una perspectiva personal.
Levin también destaca un aspecto crucial para la satisfacción profesional: "A menudo es más el entorno interpersonal, que las tareas específicas del trabajo, lo que determina hasta qué punto la persona es feliz". Por ello, el contexto laboral y las relaciones con colegas deben ser considerados antes de aceptar cualquier cambio.
Jennifer Hunt, ingeniera química con más de tres décadas de experiencia, relata cómo su cambio a un rol gerencial le proporcionó estabilidad financiera cuando más la necesitaba. "Tenía dos hijos pequeños. No tenía otro ingreso proveniente de una pareja y no sabía si tendría un trabajo después de que terminara cada contrato", explicó. Sin embargo, advierte que la gestión implica asumir nuevas responsabilidades: "Como gerente, tienes la responsabilidad de los medios de vida de las personas de tu equipo".
Los expertos coinciden en que no hay nada de malo en pausar o recalibrar el rumbo profesional. Explorar diferentes roles y perspectivas puede enriquecer una carrera y adaptarse a los cambios personales o laborales. Como señala Wright, "seguir lo que te hace feliz" es un principio fundamental que permite encontrar satisfacción en cualquier etapa.
Con una combinación de autorreflexión, opiniones externas y una evaluación honesta de prioridades, los profesionales pueden tomar decisiones informadas que les permitan avanzar en sus trayectorias con confianza y claridad.