Foto: Patricia Manero (NotiPress/Composición)
A pesar de registrar avances económicos, múltiples empresas familiares mexicanas enfrentan tensiones estructurales y familiares no resueltas. Esta situación fue documentada en el estudio "Nivel de progreso de las empresas familiares para lograr su continuidad y armonía", elaborado por el Centro de Investigación para Familias de Empresarios (CIFEM) de BBVA e IPADE Business School.
Durante la presentación, realizada el 20 de mayo de 2025, se explicó que 78% de las empresas familiares reportó un aumento en sus ventas en los últimos tres años. Asimismo, 74% indicó un incremento en su patrimonio, de acuerdo con información proporcionada para NotiPress. Sin embargo, esas mejoras no se reflejaron proporcionalmente en sus procesos de cohesión interna. Ricardo Aparicio Castillo, director del CIFEM-BBVA, mencionó: "Los indicadores financieros son positivos, pero la mitad de estas organizaciones no entrega dividendos lo cual podría generar fricciones si no se explica de forma transparente".
El estudio incluyó indicadores sobre distribución de utilidades, evolución patrimonial y percepción de unidad familiar. De las compañías evaluadas, 28% afirmó que sus dividendos aumentaron, mientras 37% no distribuye ninguna utilidad. Este panorama representa una posible fuente de conflicto entre los miembros que no participan activamente en la gestión operativa.
Ricardo Aparicio añadió: "No entregar dividendos no es un problema en sí mismo, pero debe estar alineado con una política clara que justifique esa decisión y cuente con respaldo del grupo familiar".
Dentro del mismo periodo, solo 41% de los encuestados reportó una mejora en la armonía y unidad familiar. En contraste, 20% señaló un deterioro en ese aspecto, cifra relevante, ya que las relaciones interpersonales dentro de la familia empresaria influyen en la estabilidad de los negocios. De acuerdo con el estudio, mantener un entorno familiar estable es tan importante como la rentabilidad económica para la continuidad del proyecto empresarial.
Alfonso Bolio Arciniega, profesor decano del IPADE y coautor del informe, indicó: "Es importante no confundir resultados financieros positivos con éxito integral. La unidad familiar requiere atención y trabajo constante".
Gráficas incluidas en el estudio muestran que, aunque existen indicadores financieros favorables, las organizaciones con estructuras informales o conflictos no resueltos tienen más dificultades para consolidar esos resultados en el mediano plazo. Por ejemplo, 37% de los participantes declaró no percibir cambios en la armonía familiar en los últimos años. Este dato, según los autores, debe interpretarse con cautela por el riesgo de inacción.
Fortalecer la comunicación, establecer criterios de reparto de beneficios y consolidar espacios de diálogo familiar figuran entre las recomendaciones generales del estudio. Sin sustituir el análisis financiero, estos aspectos representan elementos críticos para prevenir fracturas internas que puedan comprometer la viabilidad empresarial.
DESCARGA LA NOTA SÍGUENOS EN GOOGLE NEWS
