Ciudad de México,
Fernanda Martínez
Crédito foto: Sergio F Cara (NotiPress)
La vida digital provocó que varias empresas se dieran cuenta de que basar sus operaciones en determinada zona geográfica podría tener consecuencias en tiempos de crisis. Buscando evitarlo, muchas optaron por el nearshoring y América Latina se posiciona como una de las regiones más competitivas.
El nearshoring consiste en transferir parte de las operaciones comerciales de una empresa a un país geográficamente cercano para facilitar el movimiento de mercancías a los mercados finales. Sus beneficios han hecho que corporaciones líderes muden sus operaciones para amortiguar el riesgo de una futura crisis de interrupción de la cadena de suministro.
Latinoamérica es una de las zonas más competitivas para el nearshoring, según comentó Denis Pineda, gerente general en Universal Robots a NotiPress. Empresas estadounidenses, canadienses y hasta europeas optan por la región por su proximidad geográfica y mercados financieros maduros.
Cifras del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), señalan que las oportunidades de nearshoring impulsarán la exportación de bienes y servicios en aproximadamente 78 mil millones de dólares en el corto y mediano plazo. Los países que más se benefician con este modelo de negocio son México y Brasil, teniendo crecimiento de las exportaciones de 35 mil millones y casi ocho mil millones de dólares, respectivamente.
Si bien, solo son estimaciones, algunos países ya han experimentado los beneficios del nearshoring, aseguró Pineda. Panamá, por ejemplo, se impulsó el Establecimiento y Operación de Empresas Multinacionales de Prestación de Servicios Relacionados con la Manufactura (EMMA) para ofrecer sitios seguros y competitivos para empresas extranjeras.
También existen otros ejemplos, como la planta de BMW, instalada en San Luis Potosí, México en 2019, atrajo a los principales proveedores de la ensambladora alemana. De esa manera, el valor de la producción local incremento un 75 por ciento y tres cuartas partes de los vehículos que se venden en México y países vecinos provienen de procesos y piezas fabricadas de dicha localidad.
México presenta algunos retos con la llegada del nearshoring a la región. En primer lugar, el capital humano tiene limitaciones frente a sectores clave como el tecnológico, sin embargo, en los últimos años más mexicanos se suman a las filas de ingenieros.
Las barreras gubernamentales construidas alrededor del sector de las energías renovables han aumentado la preocupación sobre el compromiso de México con la sostenibilidad. El T-MEC ha permitido acelerar la transición energética, orillando al país a construir un camino más sostenible.
Por su parte, los desafíos adicionales incluyen deficiencias de infraestructura pública, pero en la región del Bajío y norte de México ha mejorado en los últimos años. No obstante, el sector eléctrico es una de las principales preocupaciones, aunque con el cumplimiento de las disposiciones del T-MEC y el cambio de gobierno en 2024, mejorará el panorama operativo en los próximos años.
Entre las ventajas de América Latina para empresas extranjeras, son las zonas horarias similares a las de Estados Unidos y Canadá, además de compartir rasgos históricos, sociales y culturales. Pero también, cuenta con obstáculos como la mala reputación de varios países latinoamericanos en materia de seguridad y corrupción, lo cual eclipsa muchas ventajas de la región.
Atraer el talento adecuado para llevar las operaciones de la empresa, también puede representar un gran desafío para las empresas extranjeras. Aunque muchos países latinoamericanos cuentan con universidades de clase mundial, en varias regiones la pobreza es tan prevalente que los estándares académicos no se cumplen.
En los últimos años, las empresas extranjeras han considerado al nearshoring como una estrategia crucial para sus operaciones. En ese sentido, el gerente señaló que en los próximos años seguirá prevaleciendo un escenario favorable para América Latina.