Ciudad de México,
Fernanda Martínez
Crédito foto: Sergio F Cara (NotiPress)
El Juzgado Décimo Primero de Distrito en Materia Civil en la Ciudad de México publicó el esquema de enajenación de los bienes convenido de Mexicana de Aviación. Además, se detalló que los acreedores se podrán ver beneficiados del proceso de compraventa de la marca.
Los interesados, es decir, las asociaciones de trabajadores y la propia empresa, tendrán acceso al esquema de enajenación para manifestar lo que a su derecho convenga por 10 días. Además, tiene como finalidad garantizar la máxima publicidad del proceso, según el artículo 206 de la Ley de Concursos Mercantiles, así como sus correlativos 7, 77, 185, 207 y 208 de la misma ley.
Horacio Nicolás Ruiz Palma, juez titular del Juzgado Décimo Primero de Distrito en Materia Civil, detalló que la venta de la aerolínea incluye:
Ruiz Palma dirige el concurso mercantil al cual se sometió Mexicana de Aviación después de declararse en quiebra. Además de conducir el proceso de liquidación y cubrir las deudas de la empresa, se encargará que los primeros en recibir la adeuda serán los trabajadores, el fisco y después los acreedores privados.
Igualmente, según con el acuerdo, independientemente de las acciones que se realizan en el procedimiento laboral, tanto la empresa como los demás acreedores deben de conocer los pormenores de las ventas. Las transacciones están valuadas en 815 millones de pesos, las cuales, de ser factible legalmente, podrán ser manifestadas según a lo que su derecho corresponda y sin perjuicio.
Adicionalmente, el acuerdo detalla que la determinación de la Junta Laboral de enajenar los bienes de Mexicana de Aviación inciden directamente en el concurso mercantil. Esto con la finalidad de verificar el actuar del síndico para que respete la ley concursal, pues todo el patrimonio está sujeto al procedimiento de insolvencia.
Hace algunos días se cerró la venta de Mexicana de Aviación, después de que un juez levantara el recurso que impedía la continuidad del concurso. Anteriormente, un grupo de 200 jubilados de la aerolínea pedían un esquema de repartición para priorizar la antigüedad, así como las pensiones adeudas.