Foto: Sergio F Cara (NotiPress/Composición)
El creciente interés por la sostenibilidad y la inversión responsable está moldeando un nuevo paradigma en los mercados financieros globales. La preocupación por temas como la protección del clima, la conservación de los recursos y las energías limpias se ha intensificado, impulsando a los inversores a reconsiderar sus estrategias. Los fondos cotizados en bolsa de ETF, evolucionaron significativamente, ofreciendo soluciones flexibles y adaptables a estos objetivos medioambientales, sociales y de gobernanza.
A partir de 2023, el volumen de capital invertido en fondos sostenibles, incluidos los ETF, siguió aumentando a nivel mundial, con Europa liderando este crecimiento con 40 mil 000 millones de dólares en flujos netos hacia ETF sostenibles. Este fenómeno se da en un contexto en el que los riesgos ASG (Ambiental, Social y Gobernanza) siguen siendo clave para las empresas, al tiempo que regulaciones y demandas de consumidores continúan impulsando la transición hacia una economía más responsable.
Innovación en ETFs y sostenibilidad
La innovación en el sector de los ETF propició que los inversores accedieran a una amplia gama de productos que integran criterios ASG, desde ETF temáticos hasta aquellos que siguen índices de referencia de descarbonización. Esta nueva generación de fondos, que incluye ETF activos y de renta fija, ofrece mayores oportunidades para aquellos interesados en invertir con un enfoque sostenible.
Entre las soluciones más destacadas se encuentran los ETF de ESG (Environmental, Social, Governance), centrados en temas específicos como la energía limpia o la igualdad de género. Estos productos permiten a los gestores de cartera no solo obtener rendimientos financieros, sino también contribuir de manera significativa a la lucha contra el cambio climático y la pérdida de biodiversidad.
Descarbonización y opciones de inversión
Los ETF de descarbonización, diseñados para alinear las carteras con objetivos climáticos como los establecidos en el Acuerdo de París, ganaron relevancia. Estos fondos permiten a los inversores excluir a empresas con altas emisiones de carbono sin sacrificar la diversificación y la liquidez de sus carteras.
A medida que el panorama de los ETF crece rápidamente, la oferta de productos sostenibles se expande, proporcionando a los inversores una variedad de enfoques para integrar consideraciones medioambientales en sus carteras. Esta tendencia de inversiones responsables pone en el ojo de la cámara la opción de adoptar estrategias que, además del rendimiento financiero, también contribuyan con la transición hacia una economía más limpia y responsable.
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