
Foto: LinkedIn Frida Ruh
Durante el evento WIRED Summit: The Big Interview, la especialista en inteligencia artificial, Frida Ruh, propuso el concepto de "cómputo básico universal" como alternativa al ingreso básico universal. Este enfoque busca democratizar el acceso al poder computacional, actualmente concentrado en pocas empresas, y así enfrentar las brechas que impone el avance tecnológico en regiones como América Latina.
Ruh, reconocida entre las 100 voces más influyentes en IA a nivel mundial y parte de Forbes 30 Under 30, argumentó que "el capital ya no es solo dinero, sino también poder computacional". Frente a ello, planteó que la redistribución de este recurso debe considerarse un derecho en un entorno donde las corporaciones controlan los modelos más potentes.
Con experiencia en Google, startups tecnológicas y el Foro Económico Mundial, Ruh explicó que su iniciativa AI The New Sexy promueve la inclusión de mujeres y personas de la diversidad en tecnología, a través de educación y herramientas de IA. En su visión, los modelos de desarrollo deben construirse con base en contextos locales, especialmente en países sin infraestructura ni regulación sólida.
Durante la entrevista publicada por WIRED en Español, sostuvo que "en lugar de redistribuir ingresos, deberíamos redistribuir el capital", y subrayó que este nuevo capital son los sistemas y redes que hacen posible el desarrollo de la IA. Propuso imaginar futuros posibles donde la tecnología sirva para mejorar la calidad de vida más allá de la productividad.
Además, criticó que el contenido en internet esté diseñado para entornos de alta conectividad o dispositivos costosos, lo que excluye a gran parte de la población. "Hay personas que deben elegir entre instalar ChatGPT, la app del banco o sus redes sociales", explicó, enfatizando la necesidad de modelos locales y de código abierto.
Desde su perspectiva, el problema de fondo es que México carece de estrategias digitales sostenibles. "Las iniciativas suelen morir con el cambio de legislatura. Si el trabajo es colaborativo entre Gobierno, empresas y sociedad civil, será más difícil que se archive", señaló.
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