Ciudad de México,
Jorge Cerino
Crédito foto: NASA/Bill Ingalls
Uno de los objetivos del rover Perseverance en Marte es la recolección de rocas marcianas y sedimentos para buscar señales de vida microscópica antigua. De los 43 tubos muestra de Perseverance, cuatro se han llenado ya con núcleos de roca y uno con atmósfera marciana. Mientras tanto, la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio de Estados Unidos (NASA) trabaja en tecnología con la que traerá estas muestras de vuelta a la Tierra y afina los detalles de qué hará con estas muestras en la década siguiente.
La campaña de regreso de muestras de Marte comprende múltiples misiones diseñadas para recuperar las muestras que Perseverance recolectará durante los próximos años. Actualmente, la campaña se encuentra en la fase de diseño conceptual y desarrollo de tecnología y se espera, involucre múltiples naves espaciales, lanzamientos y docenas de agencias gubernamentales. La motivación principal para analizar las muestras en la Tierra y no en Marte es la posibilidad de recurrir a tecnologías y laboratorios demasiado complejos como para enviar al espacio.
Según información de la NASA, el principal propósito para el análisis de las muestras de rocas y sedimentos marcianos es responder a la pregunta de si ha existido vida en algún lugar del sistema solar además de la Tierra. Para esto, uno de los principales retos de la NASA será mantener las muestras químicamente prístinas para su estudio riguroso, mientras se somete su contenedor de almacenamiento a medidas extremas de esterilización. Aunque el riesgo de traer algo vivo a la Tierra es bajo, la NASA asegura que tomará medidas significativas para garantizar el sellado seguro de las muestras marcianas durante su viaje.
En este sentido, señalan que décadas de datos de orbitadores, módulos de aterrizaje y rovers en Marte sugieren una probabilidad muy baja de recuperar muestras con organismos marcianos vivos. En cambio, la NASA espera encontrar materia orgánica fosilizada u otros signos de vida microbiana antigua entre las muestras de roca y sedimentos.
Recientemente, la NASA dio a conocer que trabaja ya en tecnologías para regresar estas muestras de rocas y sedimentos de Marte de vuelta a la Tierra. Entre estas tecnologías se incluye un aterrizador, basado en una plataforma de 2 mil 400 kilogramos, pensado para soportar el cohete el cual impulsará al Perseverance para salir de la atmósfera marciana. Este cohete será de 2.8 metros de largo, deberá combinar la propulsión necesaria con materiales resistentes y el combustible adecuado.
Aunque hace apenas unos meses de su llegada a Marte, Perseverance ya realizó varios descubrimientos científicos. Entre estos se incluye la confirmación de que el cráter Jezero fue antiguamente un lago, con un flujo de agua constante, consistente con un clima marciano cálido y húmedo hace 3,700 millones de años. Entre sus logros también se cuentan las pruebas de vuelo del primer helicóptero en Marte, Ingenuity, enviado al interior del rover. El helicóptero ha realizado ya varios vuelos, donde ha fotografiado el horizonte marciano y recolectado información para futuras pruebas.
Si bien la campaña de regreso de muestras de Marte a la Tierra se desarrollará lentamente a lo largo de una década, las primeras de sus misiones ya se están realizando. Perseverance ya comenzó con la recolección de muestras de rocas y sedimentos, mientras la NASA en la Tierra trabaja en el desarrollo de la tecnología que traerá estas muestras para su análisis.