Ciudad de México,
Alondra Reyes
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Según la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), los manglares están en peligro, pues están desapareciendo de tres a cinco veces más que el resto de bosques. En los últimos 40 años los manglares se han reducido hasta la mitad, menciona la organización.
Los manglares son ecosistemas que se encuentran entre la tierra y el mar, formaciones vegetales leñosas, con árboles de 1 a 30 metros de altura. Sirven como zonas de bienestar, alimentación y protección de crustáceos y alevines, esto a su vez sirve para la producción pesquera. Estos ecosistemas funcionan como barreras naturales contra inundaciones y huracanes, protegiendo las costas. De igual manera, tienen la funcionalidad de un filtro biológico, que ayuda a mejorar la calidad del agua. Gracias a los manglares se mantienen protegidos mucha de la flora y fauna de la zona, menciona Biodiversidad mexicana.
México cuenta con el 6% del total de mangles en todo el mundo, solo por debajo de Indonesia, Australia y Brasil. Algunas de las mayores amenazas contra los manglares en México son la tala, consecuencia de actividades ganaderas, agrícolas, turísticas y acuícolas. No obstante, también influyen otros aspectos como el cambio climático.
Dado que los manglares significan un refugio para salvaguardar la vida de muchas especies, la UNESCO declara que es de suma importancia proteger este ecosistema. Así, declaró la directora general, Audrey Azoulay: "los manglares son un nexo entre la tierra y el mar: estas plantas, enraizadas en aguas salinas y en suelos expuestos a las mareas, forman un universo singular y frágil, un refugio de vida que debemos proteger".
Si se pierden los manglares, también se pierde a todos los organismos terrestres y acuáticos que dependen de ellos. Esto también implicaría un gran golpe al combate por elcambio climático, pues los manglares ayudan con la absorción del dióxido de carbono. Por esta razón es importante concientizar a la población sobre la preservación de estos ecosistemas, declara Azoulay.