Aleksandr Motin (WikiCommons: CC BY-SA 4.0) (foto sin cambios)
El pasado lunes 31 de enero 2022, Jim Ryan, presidente y CEO de Sony Interactive Entertainment, hizo pública la compra de Bungie Studios. La cifra por la cual Sony adquirió al estudio estadounidense oscila los 3 mil 600 millones de dólares. Este movimiento sería parte de una estrategia de la empresa japonesa por incrementar su audiencia y a su vez, ampliar los alcances de la marca PlayStation mas allá de la consola.
Fundada por Jason Jones y Alex Seropian en el año 1991, Bungie nace como un desarrollador de videojuegos para computadoras (en Mac y Windows). Dentro de sus primeros trabajos se encuentran Marathon y Myth, ambos como el antecedente de lo que después lograría la empresa con Halo hacia el año 2001. Esta última saga es una de las más vendidas por parte de Microsoft, con un acumulado de 81 millones de copias vendidas en 20 años de historia.
Según un comunicado de Bungie, la creadora de Halo aun conservaría su independencia creativa, uno de los elementos que la han caracterizado en su trayecto por la industria de los videojuegos. "Seguimos a cargo de nuestro destino y continuaremos publicando de forma independiente y desarrollando creativamente (...) Nuestros juegos seguirán estando donde está nuestra comunidad, donde sea que elijan jugar".
Para Sony, este sería el primer paso de un movimiento mucho más elaborado que en palabras de Jim Ryan, implicaría extender los alcances de PlayStation a otros horizontes. "Esto puede tomar muchas formas (...) Filosóficamente, no se trata de llevar cosas al mundo de PlayStation, se trata de construir juntos mundos nuevos, enormes y maravillosos", dijo en entrevista con el medio gamesindustry.biz.
Además, el CEO dejó en claro que esta transacción no es la última de la firma, por lo cual llegarían más adquisiciones de Sony Interactive Entertainment en el futuro. "Absolutamente deberíamos esperar más, de ninguna manera hemos terminado. Con PlayStation, tenemos un largo camino por recorrer. Pero en otras partes de la organización, tenemos muchos más movimientos que hacer".
De esta forma, la compra de Bungie se une a una serie de movimientos millonarios producidos en el mercado de los desarrolladores de videojuegos solo en el mes pasado. El primero de ellos fue la venta de Zynga (Farmville) a Take-Two el día 10 de enero y el segundo, la adquisición de Activision Blizzard (Call of Duty) por parte de Microsoft apenas una semana después.
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