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El proceso denominado como "metástasis" es la principal causa de muerte por cáncer. La metástasis es propiciada por el cáncer, y consiste en la multiplicación rápida de células anormales que se extienden más allá de sus límites habituales, capaces de invadir partes adyacentes del cuerpo.
Por tal motivo, crearon un dispositivo implantable de vacuna contra el cáncer conocido como NanoLymph. Dicho dispositivo es capaz de reclutar y activar localmente células inmunitarias antitumorales. Lo cual provoca una respuesta inmunitaria antitumoral sistémica.
Dirigidos por el doctor Alessandro Grattoni, profesor de Nanomedicina del Hospital Houston Methodist, se desarrolló "NanoLymph". El dispositivo se implanta por debajo de la piel y consta de un depósito doble en donde se colocan estimulantes y antígenos que generan inmunidad. Después de cicatrizar la herida de implantación, y que el cuerpo del paciente aceptó el dispositivo, los especialistas introducen en el dispositivo inmunoestimulantes y antígeno encapsulado.
Una vez realizado dicho proceso, las células dendríticas comienzan su accionar y se dirigen hacia los ganglios linfáticos, mismos que generarán una respuesta inmune de células T antitumorales. Además, a diferencia de otras vacunas contra el cáncer, NanoLymph está diseñado para ser una plataforma a largo plazo, según consultó NotiPress. Por ello, es posible rellenarlo con una invasividad mínima y así brindar una activación inmunitaria continua adaptable en función de la respuesta continua del paciente a la terapia.
La elución sostenida y continua de fármacos y antígenos permite a NanoLymph generar un microambiente local enriquecido. Esto conduce a la localización, activación y presentación cruzada de CD a las células T en todo el sistema linfático. Además, NanoLymph es biocompatible, mecánicamente estable y mínimamente invasivo, lo que lo hace ideal para futuras aplicaciones clínicas.
Finalmente, debido a su considerable flexibilidad, NanoLymph podría ser usado, también, para controlar de manera efectiva otras enfermedades moduladas por el sistema inmunitario. Lo cual representa un papel crucial pues no muchos pacientes responden positivamente a los tratamientos convencionales. Además de que la resistencia a la inmunoterapia puede provocar una recaída del cáncer. Por lo tanto, existe una necesidad crítica de aumentar la tasa de respuesta a la inmunoterapia contra el cáncer para todos los tipos de neoplasias malignas y en todas las poblaciones de pacientes.
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