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Según el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), en México hay una incidencia de Parkinson de 40 a 50 personas por cada 100 mil habitantes, es decir, aproximadamente 50 mil personas padecen esta enfermedad en el país. Asimismo, cerca de 900 mil personas enferman de Alzheimer en territorio mexicano, y se prevé, para 2050 esta cifra se incrementará a 6.5 millones debido al desconocimiento de la enfermedad. A nivel global el número de pacientes de esta enfermedad asciende a los 47 millones y se estima, aumentará a 75 millones en 2030 y 132 millones en 2050.
Ante esto, académicos y científicos han ocupado su carrera a investigar la enfermedad y desarrollar tratamientos en función de tratar los síntomas y mejorar la calidad de vida de la persona que la padece. En este sentido, el Instituto de Información Científica sobre el Café (CIIU), junto con la Universidad de Kristianstad realizó un estudio que indica el papel fundamental del consumo de café en función de reducir el riesgo de padecer trastornos neurodegenerativos como el Alzheimer y Parkinson.
El estudio, escrito por la profesora Elisabet Rothenberg, se dedicó a analizar el papel que tienen los componentes de la dieta, incluida la cafeína, en la reducción del riesgo de padecer trastornos neurodegenerativos. Cabe destacar, el funcionamiento de la cafeína y otros compuestos de origen vegetal contenidos en el café, por ejemplo, los fitoquímicos y polifenoles han sido de gran interés científico en esta década.
Para la realización del informe, se analizaron diversos estudios epidemiológicos donde se concluye que el consumo moderado de café, es decir, entre tres y cinco tazas al día, está relacionado con un menor riesgo de desarrollar Alzheimer. En este sentido, los bebedores de café podrían reducir hasta 20 por ciento el riesgo de padecer enfermedades neurodegenerativas.
De esta manera, el informe reveló importantes hallazgos en materia de enfermedades neurodegenerativas, por ejemplo, la dieta puede tener un fuerte impacto en el riesgo de desarrollar este tipo de padecimientos. Igualmente, el consumo de café podría ayudar a reducir el riesgo de estas enfermedades, así como aliviar los síntomas. Asimismo, los propios investigadores indicaron, es necesario realizar más investigación y pruebas en función de comprender mejor las asociaciones.
Igualmente, las conclusiones informan, el efecto del café suele ser más fuerte en hombres, haciendo que éstos sean menos propensos a estas enfermedades. Por otra parte, los niveles de estrógeno presentados en las mujeres compiten con la cafeína en esta materia.
La dieta es un factor importante al estudiar el Alzheimer y Parkinson. De acuerdo con Rothenberg, el impacto dietético mejor documentado tiene origen en las dietas mediterráneas, es decir, una alimentación con base en frutas, verduras y semillas. Asimismo, la profesora también menciona, es necesario bajar el consumo de grasas saturadas, proteínas de origen vegetal y azúcares refinados.
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