Foto: Sergio F Cara (NotiPress)
Recuperar el sueño es crucial para el bienestar mental, la productividad diurna, la calidad de vida y la salud en general. Sin embargo, existe infinitas razones para dormir mal desde acontecimientos estresantes durante la vida cotidiana, hasta los problemas relacionados con la salud. Para muchos, conciliar con el sueño se convierte en un desafío aun mayor durante la época de fiestas. Es por eso que expertos del Houston Methodist ofrecen una serie de consejos para tener un mejor descanso.
"Tendemos a pensar en el sueño como un lujo, pero es en realidad una necesidad", comentó a NotiPress el Dr. Randall Wright, neurólogo especialista en medicina del sueño del Hospital Houston Methodist. De acuerdo con el especialista, hay cinco formas en las que la falta de sueño afecta a todo el cuerpo
- Estado de ánimo: el Dr. Wright señala que la falta de sueño puede alterar el equilibrio de los neurotransmisores y las hormonas que respaldan el bienestar en general. Como consecuencia, la persona puede llegar a experimentar depresión y ansiedad. "Lo que hace que esto sea más problemático es que se convierte en un círculo vicioso, ya que la ansiedad y la depresión pueden dificultar el sueño reparador. Ambos también pueden afectar la forma en la que comes, te mueves e interactúas socialmente, lo que, como se mencionó, también afecta a su vez el sueño", indicó.
- Rendimiento físico: dado que el sueño es crucial para la recuperación y reparación muscular, una cantidad inadecuada puede no permitirle al cuerpo recuperarse bien lo que lleva a entrenamientos más lento e incluso un mayor riesgo de lesiones en ciertos casos.
- Toma de decisiones: como la falta de sueño puede conducir a la disfunción del lóbulo frontal, esto puede afectar al control de los impulsos y la restricción mental. Además, dormir inadecuadamente puede provocar sesgos cognitivos como patrones de pensamiento negativos y rumiación, que exacerban los sentimientos de tristeza, ansiedad e irritabilidad.
- Sistema inmunológico: Al dormir, el cuerpo aprovecha la etapa de restauración para reforzar el sistema inmunológico. Por lo tanto, la privación de sueño crónica contribuye a una inflamación crónica. "Esto probablemente explique la conexión que vemos entre los problemas de sueño a largo plazo y el riesgo de ciertos tipos de cáncer", afirmó el Dr. Wright. Asimismo, la inflamación crónica está relacionada con la presión arterial alta, la diabetes tipo 2, las enfermedades cardíacas, la demencia, ciertos tipos de cáncer y más.
- Regulación del azúcar en sangre: Este proceso sigue siendo importante al momento de dormir. De hecho, es un momento en el que el cuerpo se vuelve más sensible a la insulina, la hormona responsable de transportar la glucosa a las células para obtener energía o almacenarla. La falta de sueño puede interrumpir la regulación de la glucosa ya que también se ve alterado el ritmo cardíaco.
Qué hacer ante la falta de sueño
El especialista del Houston Methodist recomienda corregir el sueño por el bien de la salud en general. Para eso, aconseja:
- Dormir de siete a nueve horas todas las noches
- Mantener un horario regular de sueño, incluso cuando haya tiempo libre
- Evitar actividades estimulantes, como mirar el teléfono antes de acostarse
- Crear un ambiente para dormir que sea fresco, oscuro, silencioso y libre de distracciones
- Seguir una rutina de relajación que ayude a calmarte antes de acostarse
Si la persona sigue experimentando problemas a la hora de dormir, la mejor opción es hacer una consulta médica. Aun así, estos consejos pueden resultar eficientes durante la época de fiestas cuando, entre fiestas y celebraciones, el descanso suele quedar relegado.
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