¿Qué hace la leche por tu cuerpo?

La leche aporta nutrientes esenciales que contribuyen a la salud ósea y al fortalecimiento de los huesos en diferentes etapas de la vida. Su consumo, acompañado de una dieta balanceada y ejercicio regular, ayuda a prevenir enfermedades relacionadas con la fragilidad ósea, de acuerdo con especialistas en medicina general.

El Dr. Kyle Mueller, médico de atención primaria en el Hospital Houston Methodist, explicó que la densidad ósea es un factor determinante en la resistencia de los huesos. "Una manera fácil de comprender la importancia de la salud ósea es pensar en la densidad ósea, que es como medimos la resistencia ósea. Los huesos densos son más resistentes a las fracturas", indicó.

Mueller señaló que un bajo nivel de densidad ósea puede derivar en diagnósticos como osteopenia u osteoporosis, condiciones las cuales elevan el riesgo de fracturas. La buena noticia, destacó, es que tanto la dieta como el ejercicio influyen directamente en el fortalecimiento de los huesos y en la prevención de estos padecimientos.

La leche es considerada una de las principales fuentes de calcio, mineral clave en la formación y estructura ósea. "El calcio es un componente fundamental de los huesos, contribuye a la formación, estructura y fortaleza de los huesos", afirmó el especialista. Un vaso estándar de leche contiene alrededor de 300 miligramos de calcio, cantidad significativa frente a la recomendación diaria de entre 1000 y 1300 miligramos.

Además, la leche suele estar fortificada con vitamina D, elemento indispensable para que el cuerpo pueda absorber el calcio. "La vitamina D cumple muchas funciones, una de las cuales es ayudar con la absorción del calcio", puntualizó el médico. La combinación de ambos nutrientes permite optimizar la salud ósea de manera más efectiva.

Para quienes presentan intolerancia a la lactosa, existen opciones seguras. "Existen enzimas lactasas, por lo que la gente puede seguir consumiendo productos lácteos. O existe la leche sin lactosa, en la que la lactosa se ha eliminado por completo", explicó Mueller. El médico agregó que alternativas como la leche de soya o almendras suelen estar fortificadas con calcio y vitamina D, aunque recomendó revisar las etiquetas nutricionales.

Otros alimentos también contienen calcio, aunque no siempre es absorbido con la misma eficacia. "Tomemos como ejemplo las espinacas que a primera vista, parecen un alimento rico en calcio. Pero debemos considerar su biodisponibilidad: ¿se puede absorber el calcio de las espinacas? La respuesta es: no de forma eficaz", aclaró el médico.

El ejercicio de resistencia también desempeña un papel relevante. "Caminar, trotar y correr son ejercicios que implican soportar peso y pueden favorecer la salud ósea, especialmente la de las piernas", explicó Mueller. Añadió que el entrenamiento de fuerza fortalece los huesos en todo el cuerpo debido a la tensión generada por los músculos sobre ellos, incrementando la densidad ósea.

Finalmente, el especialista recomendó mantener una dieta equilibrada con frutas, verduras, cereales integrales y productos lácteos. En caso de deficiencia, se puede recurrir a suplementos de calcio o vitamina D, siempre con supervisión médica.