Foto: Gustavo Torres (NotiPress)
Un paro complica nuevamente a 27 aeropuertos del país. La huelga es llevada a cabo por la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), agrupados en la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), y tiene lugar entre las 6 y las 12 horas, y las 17 y las 22 horas. Durante ese período, los gremios aseguraron que se garantizarán solo los vuelos sanitarios, humanitarios y aeronaves de Estado. Por su parte, el Gobierno contraatacó a las medidas de fuerza anunciando que inició conversaciones con varias empresas privadas para hacerse cargo de las operaciones de Aerolíneas Argentinas en el caso de que los paros continúen.
Esta nueva movilización por parte de los gremios de los pilotos de Aerolíneas Argentinas se da luego de que el Gobierno presentara una denuncia contra Pablo Biró, secretario general de Asociación Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), por "amenazas y extorsión" después de que el dirigente sindical asegurara que "esto se va a poner mucho peor".
Por su parte, APLA y la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA) denunciaron "la intención del Gobierno de forzar el cierre de Aerolíneas Argentinas". Además, aseguraron que "la resolución de las diferencias entre empleadores y trabajadores debe transcurrir en el terreno del diálogo social y no en la búsqueda de responsabilidades penales en una u otra declaración o acción cuyo único fin es defender los derechos laborales de los trabajadores aeronáuticos".
En este sentido, responsabilizaron al presidente de Aerolíneas Argentinas, Fabián Lombardo, sosteniendo que, "como consecuencia del despido arbitrario de 3 compañeros pilotos, presentó su renuncia el Gerente de Operaciones de la empresa, es decir, quien tiene bajo su responsabilidad toda la flota". En efecto, alertaron sobre "las implicancias para la seguridad operacional que este contexto de conflicto genera, y de cuyas potenciales consecuencias, el único responsable es el presidente de la empresa".
Mientras tanto, APLA y AAA realizarán asambleas para resolver la continuidad de las medidas de fuerza. Estas pueden consistir en nuevas huelgas de 24 o 48 horas o la paralización de las tareas en los centros de capacitación de los pilotos y auxiliares a bordo.
Ante las medidas tomadas durante la jornada del 19 de setiembre, el vocero presidencial, Manuel Adorni, confirmó en conferencia de prensa en Casa Rosada que el Gobierno se mantiene en conversación con varias empresas latinoamericanas para que se hagan cargo de la operación de Aerolíneas Argentinas en caso de que "las extorsiones continúen" y así, "ningún pasajero deje de poder volar como lo tenía previsto".
El vocero presidencial hizo referencia a la denuncia contra Biró asegurando que: "De esta manera, Biró, quien festejó el cierre del aeropuerto del Palomar, se abrazó con el expresidente, va a tener que tomar alguna precaución antes de hacer otro paro porque podría considerarse este como ‘huelga salvaje’".
Cabe destacar, dos gremios aceptaron la paritaria propuesta por la empresa. Al respecto, Adorni mencionó el plan de retiro voluntario propuesto a los empleados "que nadie ha aceptado, por lo tanto, evidentemente tan disconforme con la situación laboral, con sus salarios y con sus beneficios y privilegios, no están".
Para concluir, el vocero remarcó que el Gobierno irá a fondo con los "piquetes aeronáuticos". "Esto tiene que quedar bien claro porque es una decisión del Presidente y de todo el gabinete nacional", agregó.
Las medidas de fuerza se están implementando a lo largo de la jornada del 19 de septiembre en dos tramos. Primero, entre las 6 y las 12 del mediodía, y luego, entre las 17 y las 22 horas. Desde el Gobierno aseguraron que no se verían afectados los vuelos como resultado del decreto 825/2024 el cual declara al transporte aéreo comercial como servicio esencial.
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