¿Guardia Nacional a la Sedena? Estas son las características de una militarización

Militarización ha estado presente en varios países de Latinoamérica, es el caso de Argentina, Chile y México

La presencia de las Fuerzas Armadas en actividades de seguridad interior en los países latinoamericanos ha visibilizado la militarización de los Estados

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), creó la Guardia Nacional (GN) en 2019 con la finalidad de tener una doctrina policial respetando los derechos humanos. Organizaciones como el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, A.C. (Centro ProDh), exponen investigaciones refutando que GN actué sin dirección militarizada negada por AMLO.

Según el Diccionario de Asilo de CEAR-Euskadi, la militarización apunta a utilizar estrategias de control y uso de armamentos militares en otra esfera. En Latinoamérica la militarización se ha dado en Argentina y Chile cuando hicieron uso de las Fuerzas Armadas en actividades de seguridad interior.

Desde inicios de su gestión presidencial en 2015, Mauricio Macri, expresidente de Argentina, expuso su intención de incluir a la Fuerzas Armadas en cuestiones de seguridad interior. En 2016 el decreto No 228/16 declaró emergencia de seguridad pública, con el objetivo de revertir el peligro colectivo creado por el delito complejo y el crimen organizado, los cuales afectaban la República. Para 2017 especulaban una modificación al decreto No 727/06 reglamentario de la Ley de Defensa Nacional que habilitaría la participación militar en labores de seguridad interior.

Para Hall y Coyne, profesores estadounidenses de economía, la militarización puede ser directa: se realiza cuando fuerzas militares son desplegadas para participar en labores de control interno. O indirecta: asociada a marcos institucionales en el cual, las policías civiles adquieren de manera paulatina características militares, entre ellas estrategias de armamento y táctica

Se autorizó la función de las Fuerzas Armadas, el 23 de julio de 2018, como instrumento militar de defensa nacional de forma disuasiva ante agresiones de origen externo contra la soberanía de Argentina. Al igual ante cualquier agresión no compatible con la Carta de la Naciones Unidas.

Tomando en cuenta el concepto de Hall y Coyne, en Argentina durante el mandato de Mauricio Macri se dió una militarización directa, llevando la presencia de las Fuerzas Armadas a la seguridad interna. Acción que correspondería más bien a una respuesta del Estado a un ataque a su integridad.

Mientrastanto en Chile, la entrada de Fuerzas Armadas se dio tras una protesta civil en contra del aumento del pasaje del suburbano, el 6 de octubre de 2019. Como respuesta, el gobierno de Sebastián Piñera, expresidente de Chile, desplegó a policías y militares, lo cual aumentó la movilización civil.

Así pues, existió una militarización del Estado chileno debido a lo señalado por Piñera del 20 de octubre de 2019, declarando "frente al estado de emergencia en Chile, se desplegarían 9 500 hombres para restaurar los derechos y libertades". Pues el gobierno chileno observaba las movilizaciones civiles como una amenaza, a consecuencia adquirieron lógicas militares y dinámicas bélicas a cargo del general Iturriaga, militar de las Fuerzas Armadas, para solucionar el conflicto.

En México organizaciones civiles y la oposición del actual gobierno han cuestionado la creación de la GN como una militarización. Esto por su conformación por mandos militares y la posible integración a las Fuerzas Armadas en la seguridad pública. Además de las quejas por violación a los derechos humanos presentadas tras las detenciones de la Guardia Nacional.

López Obrador mencionó en el 3° aniversario de la GN el 30 de junio de 2022, su objetivo de integrar la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA). Finalidad reiterada por el mandatario el 8 de agosto en "la mañanera", desatando una serie de comentarios que supone una militarización del Estado méxicano.

A lo anterior se le suma el militarismo existente en México, entendiéndolo como la influencia política del aparato militar en la orientación del poder del Estado. Esto debido a las facultades que se otorgan a las fuerzas armadas como secretarías de Estado.

Incompatible a una institución democrática es la militarización y el militarismo, por lo cual la integración de la Guardia Nacional a la Secretaría de Defensa Nacional sería anticonstitucional. Asimismo, según expertos, estaría en contra del principal objetivo de la creación de la GN que señala iniciar una organización de carácter civil.