Ciudad de México,
Martín Olivera
Crédito foto: Martín Olivera (Composición/NotiPress)
Este domingo 19 de octubre, Bolivia celebrará por primera vez un balotaje presidencial, luego de que en las elecciones generales de agosto ningún candidato superara los umbrales exigidos por la Constitución. En aquella jornada, ningún aspirante obtuvo más del 50% de los votos válidos ni alcanzó el 40% con una ventaja mínima de 10 puntos porcentuales. Por ese motivo, se activó por primera vez en la historia democrática boliviana el mecanismo de segunda vuelta.
La elección marca un punto de inflexión en el escenario político del país. Por primera vez en dos décadas, el Movimiento al Socialismo (MAS), fuerza la cual gobernó el país en distintos periodos desde 2006, no logró posicionarse entre las fórmulas que acceden al balotaje. De acuerdo con los resultados oficiales del Sistema de Registro Preliminar de Resultados Electorales (Sirepre), Rodrigo Paz Pereira, del Partido Demócrata Cristiano (PDC), obtuvo el 32,14% de los votos (1.625.882 sufragios), mientras que Jorge "Tuto" Quiroga, de la alianza Alianza Libre, sumó el 26,81% (1.356.370 votos).
Como actual senador y exalcalde de Tarija, Rodrigo Paz impulsa una propuesta de "centro" que prioriza la descentralización del presupuesto estatal. Su compañero de fórmula, Edman Lara, es un expolicía conocido por sus denuncias públicas contra supuestos actos de corrupción dentro de la fuerza. "El 85% del presupuesto hoy lo maneja el aparato central", expresó Paz en una entrevista reciente, y propuso revertir esa distribución con un modelo denominado "Agenda 50/50".
Por su parte, Jorge Quiroga, ingeniero industrial y exmandatario interino entre 2001 y 2002, busca regresar al poder con una agenda liberal en lo económico. Su propuesta incluye apertura al capital extranjero, reducción del aparato estatal y eliminación gradual de subsidios, especialmente en combustibles. Su compañero de fórmula es Juan Pablo Velasco, empresario del sector tecnológico que declaró a El Observador: "Quiero ser la representación de los jóvenes".
En la primera vuelta también compitieron Samuel Doria Medina (Unidad), con el 19,86%; Andrónico Rodríguez (Alianza Popular), con el 8,22%; Manfred Reyes Villa (Autonomía para Bolivia), con el 6,62%; y Eduardo del Castillo (MAS), con el 3,16%. Además, se registraron 158.270 votos en blanco (2,45%) y 1.252.449 nulos (19,4%). El MAS, pese a su baja votación, conserva una base de apoyo significativa y se proyecta como fuerza opositora.
La jornada electoral también incluye participación en el exterior. El padrón fuera de Bolivia asciende a 369.931 ciudadanos, con mayor concentración en Argentina, España, Brasil, Chile y Estados Unidos. El Tribunal Supremo Electoral (TSE) habilitó la consulta del lugar de votación a través de la plataforma "Yo Participo". Las cédulas vencidas en el último año serán aceptadas para el sufragio.
De cara al balotaje, los electores deberán elegir entre dos modelos diferenciados de gobierno, con propuestas centradas en la economía, la redistribución del presupuesto y el papel del Estado. La votación definirá si Bolivia opta por una línea moderada de carácter redistributivo o por un enfoque de liberalización económica más marcado.