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El aumento en el costo de la visa H-1B en Estados Unidos provocó reacciones inmediatas entre trabajadores extranjeros y empresas tecnológicas, al tiempo que posiciona a Canadá como un destino viable para captar talento internacional. Con una nueva tarifa de 100,000 dólares por solicitud, el acceso a este programa migratorio se volvió más limitado, especialmente para profesionales calificados en sectores como ingeniería, informática y ciencias aplicadas.
La orden ejecutiva firmada por el presidente estadounidense Donald Trump el 19 de septiembre establece que el nuevo monto aplicará únicamente a solicitudes iniciales, sin afectar a renovaciones ni a titulares actuales. Según Karoline Leavitt, portavoz de la Casa Blanca, "esta NO es una tarifa anual, es una tarifa única que se aplica únicamente a la petición inicial".
A raíz del cambio, organizaciones como Build Canada y expertos en inmigración llamaron a aprovechar la coyuntura para atraer a los trabajadores que ya no podrán permanecer en Estados Unidos. En un memorando difundido el lunes, Build Canada sostuvo que "cientos de miles de profesionales H-1B altamente calificados y bien pagados ahora están buscando un nuevo hogar". La organización destacó la calidad de vida, la cercanía geográfica y el sistema académico de Canadá como ventajas comparativas.
Durante un discurso en el Consejo de Relaciones Exteriores en Nueva York, el primer ministro canadiense Mark Carney hizo referencia al tema. "Entiendo que están cambiando su política de visas, quizás podamos conservar a uno o dos", expresó. A su vez, el abogado Evan Green declaró que esta situación representa "una oportunidad maravillosa que el gobierno canadiense debe aprovechar".
Aunque los ciudadanos canadienses representaban solo el 1% de los solicitantes de visas H-1B en 2019, el contexto actual podría modificar ese porcentaje. En 2023, el gobierno de Canadá habilitó un programa especial para titulares de visas H-1B que residían en Estados Unidos, permitiendo solicitar permisos de trabajo de tres años. La convocatoria se cerró en 24 horas tras alcanzar las 10,000 solicitudes.
El abogado Mark Holthe, con sede en Calgary, explicó a BBC que varios de sus clientes se trasladaron al norte tras no renovar sus permisos. "Estas personas no tenían otra alternativa", declaró. Sin embargo, advirtió que el acceso a la residencia permanente sigue siendo un obstáculo para muchos migrantes.
Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Pensilvania reveló que, tras restricciones similares en 2004, empresas estadounidenses optaron por reubicar talento en India, China y Canadá. El informe concluyó que Canadá se benefició de su política migratoria más flexible en ese momento.
No obstante, algunos especialistas advierten sobre limitaciones actuales. "Canadá tiene sin duda un potencial, pero creo que no deberíamos exagerar ese potencial", señaló Mikal Skuterud, economista de la Universidad de Waterloo. Afirmó que el sistema migratorio canadiense también enfrenta tensiones, incluyendo una disputa política en torno al programa de trabajadores temporales.
Desde el IRCC, el portavoz Matthew Krupovich recordó que existen vías como el programa Express Entry y la Global Skills Strategy. Añadió que el gobierno continúa "identificando nuevas soluciones para atraer a los mejores y más brillantes del mundo".
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