Ciudad de México,
Ali Figueroa
Crédito foto: WikiCommons
De acuerdo con una carta firmada por 143 científicos que han formado parte de los proyectos de financiamiento Chan Zuckerberg Initiative (CZI) y Chan Zuckerberg Biohub, entre quienes se encuentran Martin Kampmann, Debora S. Marks, y Molly Gale Hammel, Facebook no cumple con sus políticas respecto a la desinformación y normas de conducta, en tanto se le ha permitido al presidente Donald Trump llevar a cabo publicaciones con mensajes de odio que fomentan la violencia y generan fake news durante el periodo de tensión entre la comunidad afroamericana por el asesinato de George Floyd, y la crisis sanitaria por la pandemia de Covid-19.
Facebook, Twitter, Instagram, y otras redes sociales masivas, surgieron ante todo como una manera de comunicar información, así como para conectar las fuentes asociadas y generar redes de temas generales y específicos; la información masiva suele estar enfocada a ciencia, economía, conflictos internacionales, figuras públicas, políticas gubernamentales, entre otros. Sin embargo, dentro de ese flujo de información, existen riesgos de propagar desinformación con intenciones maliciosas.
La carta de los 143 científicos está dirigida específicamente a Mark Zuckerberg, quien es responsable de las cuestiones administrativas, políticas y normativas de la plataforma Facebook, y tiene por objeto acusarlo de permitir el uso indebido que le ha dado el presidente Donald Trump, respecto a temas sensibles sobre acontecimientos nacionales y mundiales durante todo su mandato. Si bien su crítica está dirigida al discurso en general que maneja el mandatario, los casos más recientes están directamente relacionados con dos acontecimientos: la pandemia por Covid-19, y las movilizaciones y protestas por el asesinato de George Floyd.
En contraste con Facebook, la red social Twitter ha mostrado un manejo más estricto en las políticas de desinformación y normas de conducta, al censurar a Donald Trump luego de que el mandatario emitiera una serie de tweets refiriéndose a las movilizaciones por el asesinato de George Floyd como "disturbios cometidos por matones y acarreados", así como una serie de amenazas sobre el uso de la fuerza y alusiones racistas a los manifestantes.
Asimismo, este incidente generó una respuesta por parte del grupo TeamTrump, quienes a través de las mismas redes sociales han emitido quejas respecto al manejo de la censura en Twitter. Como intentos para mitigar el posible daño mediático dirigido al mandatario, publicaron contenido que registra un comportamiento amistoso de la policía con la población civil; sin embargo, el problema de raíz no se ha tratado por la administración de Trump, y disminuye su aprobación entre los círculos de científicos, intelectuales, políticos, sociedades civiles y grupos activistas.