
Foto: Alexa Vargas (NotiPress)
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) proyectó una ralentización del producto bruto interno (PBI) de Estados Unidos para 2026, en su informe OECD Economic Outlook, publicado el 2 de diciembre de 2025. De acuerdo con el documento, se espera que el crecimiento del PBI estadounidense sea de 2% en 2025, disminuya a 1,7% en 2026 y experimente una leve recuperación a 1,9% en 2027.
Aun así, el nuevo informe refleja una leve mejora con respecto a septiembre cuando el PBI se calculaba en 1,8% y en junio cuando se estimaba en 1,6%. Con respecto a 2026, la estimación también mejoró luego de que se anunciara que se esperaba un 1,4%.
Estas previsiones reflejan el impacto acumulado de varios factores, entre ellos el incremento sustancial en las aranceles sobre las importaciones, la reducción en la inmigración neta y los recortes en la plantilla del gobierno federal. La OCDE advirtió que "el crecimiento del producto de Estados Unidos se espera que se desacelere a medida que se sientan plenamente los efectos de tarifas efectivas sustancialmente más altas".
El informe detalla que, aunque el país continúa mostrando una inversión robusta en tecnologías relacionadas con inteligencia artificial (IA), estos impulsos no compensarían de inmediato las presiones a la baja en la actividad comercial y la inversión. En ese sentido, la recuperación proyectada para 2027 dependería de la consolidación del impacto positivo de la inversión tecnológica y de una política monetaria más laxa.
Respecto a la inflación, la OCDE prevé que esta se mantendrá por encima del 2% en Estados Unidos hasta mediados de 2026, en parte debido al traspaso de los aranceles al precio final de los bienes. Según el documento, "la inflación en Estados Unidos se espera que aumente aún más durante los próximos trimestres a medida que las tarifas se trasladen a los precios de los bienes finales, alcanzando su punto máximo a mediados de 2026, antes de moderarse gradualmente".
Por otro lado, las tasas de interés del país podrían reducirse progresivamente en línea con el control de la inflación. La OCDE estima que la tasa de interés de referencia se ubique entre 3,25% y 3,5% para finales de 2026, manteniéndose estable a partir de ese punto.
La dinámica comercial también se verá afectada. El informe señala una disminución en las importaciones estadounidenses debido a los altos aranceles, lo cual ha contribuido a reducir el déficit de cuenta corriente. Aun así, se espera que los efectos negativos sobre el comercio global persistan en 2026, con una recuperación paulatina hacia 2027.
A nivel estructural, la OCDE enfatizó que la resolución de tensiones comerciales y la previsibilidad en las políticas públicas son fundamentales para recuperar el crecimiento sostenible. El documento recomienda que los países "trabajen juntos para hacer que la política comercial sea más predecible y garantizar una resolución duradera de las tensiones comerciales".
En términos generales, la OCDE considera que, pese a la resiliencia mostrada en 2025, la economía estadounidense enfrentará presiones significativas a corto plazo. La recuperación dependerá de un entorno global más estable, mejoras en la productividad asociadas a la tecnología y políticas públicas coordinadas.
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