Ciudad de México,
Judith Moreno
Crédito foto: Sergio F Cara (NotiPress/Composición)
A partir del 1 de enero de 2026, entrará en vigor la fase obligatoria del Mecanismo de Ajuste en Frontera por Carbono (CBAM), regulado por la Unión Europea (UE). El instrumento establece una tarifa vinculada a las emisiones de gases de efecto invernadero generadas durante la producción de bienes importados, en sectores con alta intensidad de carbono.
Durante el periodo transitorio, activo entre octubre de 2023 y diciembre de 2025, los importadores deben presentar informes trimestrales detallando las emisiones implícitas de los productos. Con el inicio del sistema permanente, deberán declarar cada año las cantidades importadas y cubrir el monto correspondiente mediante certificados CBAM. Estos certificados se calcularán conforme al precio medio de subasta de los derechos de emisión bajo el Régimen de Comercio de Emisiones de la UE (RCDE UE).
Entre los sectores iniciales incluidos se encuentran cemento, hierro, acero, aluminio, fertilizantes, hidrógeno y electricidad. Cada producto listado en el Anexo I del Reglamento (UE) 2023/956 debe contar con evidencia técnica que respalde el nivel de emisiones incorporadas. En ausencia de dicha documentación, se aplicarán valores por defecto definidos por las autoridades europeas.
México no figura como país objetivo del CBAM, aunque exportadores nacionales en sectores regulados deberán estar atentos a las nuevas medidas. Empresas con destino comercial en el bloque europeo deberán implementar procedimientos de medición, reporte y verificación (MRV) mediante sistemas auditados y verificables. Falta de trazabilidad o de datos adecuados puede derivar en mayores cargas económicas.
El documento "La fuga de carbono y el CBAM", elaborado por Black to Green, identifica posibles impactos para empresas exportadoras mexicanas. Productos terminados que contengan materiales como acero o aluminio podrían enfrentar ajustes si los componentes forman parte sustancial del bien final y provienen de procesos con alta intensidad de carbono. "Al establecer un precio por las emisiones implícitas de estos productos, el CBAM garantiza que las importaciones paguen un precio equivalente al carbono emitido en la UE", indica el documento.
Además de los requisitos técnicos, el reglamento europeo contempla una transición paralela entre 2026 y 2034. Durante ese lapso, se eliminarán de forma gradual las asignaciones gratuitas del sistema europeo, mientras se fortalece la aplicación del CBAM en fases sucesivas.
Para facilitar cálculos, la Comisión Europea habilitó una herramienta digital donde exportadores pueden estimar el costo vinculado a sus productos según emisiones declaradas y volumen comercial. Esta plataforma es de acceso libre y forma parte del soporte técnico durante la etapa de implementación.
En territorio mexicano, instituciones públicas, especialistas y actores industriales ya sostuvieron sesiones informativas sobre el alcance del mecanismo. Las conclusiones apuntan a la necesidad de preparar capacidades locales, mantener seguimiento normativo y explorar mejoras operativas con enfoque en reducción de emisiones.