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La tripulación de la Expedición 70 de la NASA tiene como principales funciones estudiar una serie de fenómenos de microgravedad. Pues estos podrían tener diferentes beneficios para humanos dentro y fuera de la Tierra. Cada uno de los miembros está dedicado a diferentes áreas de investigación, en el caso de Jasmin Moghbeli, la experimentación en torno a la microgravedad se centra en la salud.
Expedición 70 arribó a la Estación Espacial Internacional el 27 de septiembre, por lo cual la tripulación recién comienza las actividades contempladas en su cronograma. Además, algunas de ellas dependen de la altura en la que esté orbitando la estación. El 19 de octubre de 2023, la NASA informó que al encontrarse un poco más alto dentro de la órbita de la Tierra, los cosmonautas realizaron actividades relacionadas con sus estudios.
Dentro de las actividades de Jasmin Moghbeli se describe el análisis de ADN para identificar bacterias extraídas de muestras de agua en la estación. Este estudio tiene como objetivo mantener seguras a las tripulaciones y naves espaciales, sin tener que depender de suministros de la Tierra. Por otra parte, también refiere, hizo pruebas de la capacidad de los dispositivos de salud Bio-Monitor. Para ello utilizó el chaleco y diadema que componen este sistema durante 48 hrs, a fin de evaluar la durabilidad de la batería.
En un reporte, la NASA explica, el Bio-Monitor es un instrumento diseñado por ingenieros de Canadá para monitorear los parámetros fisiológicos de tripulaciones espaciales. Los investigadores buscan que el dispositivo no interfiera con las actividades diarias de los astronautas. Para ello, el chaleco y diadema de monitoreo están conectados a la unidad de datos del controlar de la estación espacial. A su vez, este respalda los datos y permite sean visualizados en tiempo real por un iPad. Sin embargo, el inconveniente del sistema es que se requiere un remplazo de baterías, pues estas solo permiten grabar sesiones de máximo 48 horas.
Aunque por ahora las actividades en torno a la salud de la tripulación se limitan a las referidas, el cronograma contempla, se realicen investigaciones en torno a la salud del corazón, tratamientos de cáncer, entre otras. Respecto a estudios de cardiología, la NASA contempla un sistema microfisiológico 3D, centrado en modelar la disfunción cardíaca en microgravedad.
Dicha investigación busca prevenir los efectos negativos que la microgravedad puede causar en las funciones cardiovasculares humanas. El proyecto consiste en analizar los efectos de la microgravedad mediante un micromodelo fisiológico, basado en células humanas. Este fue creado mediante tejidos de músculo cardíaco cultivado con impresión 3D. Cabe mencionar, las investigaciones en torno a la microgravedad no se centran solo en salud, también abarcan ingeniería, biología, química, física y otros tantos.
Para entender la microgravedad, la NASA compara este fenómeno físico con la caída libre. En esta, los objetos aceleran mientras caen hasta alcanzar la aceleración debida de la gravedad. Sin embargo, en el caso de la microgravedad, contrario a lo que se piensa, los objetos no están estáticos, en realidad viajan a la velocidad orbital, por lo cual se considera no hay gravedad 0, sino movimiento gravitatorio mínimo.
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