Ciudad de México,
A Amigon
Crédito foto: cortesía Roboat
Investigadores del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) desarrollaron robots autónomos que flotan en el agua y pueden cambiar de forma para conformar diferentes estructuras capaces de maniobrar en los canales de Amsterdam.
Roboat (robote) es un proyecto para desarrollar barcos autónomos. La investigación se realizó entre los profesores del MIT y el Instituto de Amsterdam para Soluciones Metropolitanas Avanzadas (AMS Institute) con el fin de tener barcos robot que naveguen por los 165 canales de la ciudad transportando bienes y personas con lo que podría disminuir el tránsito de las calles.
El desarrollo de estos robots empezó en 2016 y con el tiempo y mejores tecnologías se han adaptado a plataformas con algoritmos de monitoreo de trayectoria. El factor para cambiar la forma fue presentado en un estudio para el Simposio Internacional IEEE en Sistemas Multi-Robot y Multi-Agente.
Cada unidad está equipada con sensores, propulsores, microcontroles, GPS, cámaras, entre otras utilidades para que, con el nuevo algoritmo, pueda planearse un ruta anticolisiones, así como poder desengancharse entre ellos para evitar cualquier obstáculo.
"Hemos habilitado a los robo-barcos para integrarse o separarse de otros robo-barcos, con la esperanza de cambiar las actividades de las calles de Amsterdam al agua", indicó Daniela Rus, directora del Laboratorio de Ciencias Computacionales e Inteligencia Artificial (CSAIL) del MIT, "un grupo de barcos pueden ir juntos para integrar formas lineales como puentes elevadizos, si necesitamos enviar materiales o personas de una lado del canal a otro. O podemos crear plataformas elevadizas más amplias para mercados de flores o comida".
Los robo-barcos fueron separados en dos tipos de unidades, coordinadores y trabajadores, para mejorar las operaciones. Los trabajadores se unen a los coordinadores para formar una "plataforma de barcos-conectados" (CVP por sus siglas en inglés).
Mediante la tecnica de "planeación de trayectorias" cada CVP traza un camino para llegar a su lugar objetivo sin ninguna interrupción en el menor tiempo posible. Esto se logra al "precalcular" las regiones libres de colisiones para luego encontrar la trayectoria más corta hasta el destino.
Con base en los experimentos de unidades de 1 metro, se planea un proyecto para 2020 llamado RoundAround con la finalidad de formar un puente dinámico de 60 metros cerca del Museo de Ciencias NEMO en el centro de Amsterdam. Este proyecto sería el primero en el mundo en hacer un puente de botes autónomos.
Se espera, después de más investigaciones, proporcionar a los botes la capacidad de soportar los diferentes climas de la ciudad, el peso de los pasajeros así como que se adapten a las diferentes formas de los canales. Al menos con robo-barcos autónomos y cambiaformas la ciudad podrá tener un atractivo turístico único en el mundo mientras disminuye el tránsito de las calles.