Ciudad de México ,
Andrés Zimbrón
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El lunes 24 de agosto, la plataforma de videoconferencias Zoom sufrió una saturación en sus servidores debido al alto tráfico de datos. Esto ocasionó la caída del servicio en un momento en el que niños y jóvenes comenzaban sus clases en línea en México. Sin embargo, no solo esta plataforma con sede en San José California está expuesta a esta situación.
Las caídas repentinas de sitios web, plataformas, aplicaciones e incluso redes de telecomunicaciones son más comunes de lo que se cree, principalmente durante la pandemia, pues las restricciones sanitarias mantienen a las personas en casa utilizando Internet más tiempo de lo normal. Ello podría generar picos de tráfico, es decir, cuando más personas están conectadas al mismo tiempo a un servidor de las que tiene capacidad de soportar, provocando su colapso.
De acuerdo con un reporte de Nielsen IBOPE, las audiencias digitales en México incrementaron en un 42 por ciento los tiempos de navegación en aplicaciones móviles y computadoras; de una hora y nueve minutos a una hora y 54 minutos en promedio. De igual manera, un informe de la empresa AIVO al que accedió NotiPress revela que el uso del chat a través de la aplicación WhatsApp creció 500% durante abril de 2020.
También los cambios o actualizaciones en los sistemas hosts puede generar fallos en las conexiones aunque, debido a ese tipo de pruebas se realizan en plataformas de prueba y no en las aplicaciones de usuario final, son menos comunes. Las empresas más susceptibles a sufrir estas afectaciones son las que ofrecen conectividad móvil e Internet, ya que nunca pueden apagar por completo todos los servidores.
Otras causas comunes de las caídas en aplicaciones como WhatsApp, Facebook o Instagram son fallos en el Sistema de Nombres de Dominio (DNS por sus siglas en Inglés), un protocolo informático que se encarga de enlazar cada dominio (como una dirección web) con su servidor correspondiente. Cuando hay saturación de información, el funcionamiento de los DNS sufre fallos, lo que impide la comunicación entre servidores y sistemas, aunque problemas de esta índole suelen ser resueltos en cuestión de minutos por las grandes compañías.
Cabe señalar que los problemas de conectividad pueden estar relacionados con algún problema físico en la infraestructura de TI, ocasionado por alguna descarga eléctrica e incluso catástrofes naturales. Asimismo, no se debe descartar las amenazas de ciberataques de piratas informáticos. Un método popular consiste justamente en saturar los servidores artificialmente, con el objetivo de vulnerar la ciberseguridad.
Además de esto, una investigación que las empresas VMWare y Opinion Matters dieron a conocer el 24 de julio de 2020 un aumento del 92% en el volumen de ataques cibernéticos en Estados Unidos durante el periodo de junio 2019 a junio 2020. Ante este panorama y las constantes quejas que recibía la plataforma por presuntos problemas de seguridad, la compañía Zoom adquirió un servicio de seguridad en mensajería y uso compartido de archivos propiedad de Keybase.
Una caída de servidores puede traer severas consecuencias, tanto para los usuarios como para las compañías. Tal es el caso de la repentina caída de Zoom, que el 24 de agosto frustró el inicio de clases de los usuarios mexicanos de esta plataforma. Por otra parte, las compañías podrían sufrir pérdidas derivadas de la imposibilidad de continuar operaciones remotas, vender sus productos a través del e-commerce, así como percibir ingresos por publicidad.