Ciudad de México,
Fernanda Martínez
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El desgaste articular de rodilla, o artrosis de rodilla, es una de las 10 principales causas de incapacidad en México, se estima que 10 de cada 100 adultos mayores lo padezcan. Se espera que en los siguientes 15 a 20 años aumente su incidencia un 50 por ciento por el aumento de la esperanza de vida y los hábitos poco saludables de la población.
La artrosis de rodilla limita el movimiento, llegando a causar una discapacidad en el paciente. El doctor Luis David Aguilar Alcalá, especialista en ortopedia y traumatología y cirujano del Centro Médico ABC, explicó a NotiPress que, según datos de la Sociedad Americana de Cirujanos de Cadera y Rodilla, un 10% de la población mundial y mayor de 60 años podría tener osteoartritis.
Este padecimiento tiene un componente inflamatorio de la articulación de la rodilla. Además, se estima que del total de pacientes con desgaste en dicha parte del cuerpo, el 56% son mujeres.
Algunos de los síntomas que se llegan a presentar son dolor, debilidad, rigidez en la articulación, crepitación e inflamación. Esto se genera debido al roce entre los huesos que no tienen cartílago, lo cual limita progresivamente su función, afectando su calidad de vida.
Entre los factores de riesgo que puede provocar el desgaste de rodillas es la edad, obesidad, sedentarismo y mala alimentación, lo cual resulta en músculos débiles. Las actividades deportivas de alto impacto hechas de forma inadecuada puede traer secuelas de traumatismos o fracturas, llegando a afectar la articulación.
Considerando que la obesidad es un problema de salud en México, señala el doctor Aguilar, afecta a las rodillas, pues el peso se transmite a esta parte del cuerpo. Además, el paciente con desgaste articular tiene menor tolerancia a las caminatas, uso de escleras o hacer movimientos de flexión.
Asimismo, este problema de salud tiene una evolución larga y los pacientes buscan alternativas no médicas, permitiendo el progreso del deterioro articular. El tratamiento ideal debe incluir ejercicios de rehabilitación, tratamiento farmacológico y quienes padecen de sobrepeso realizar una dieta y ejercicios sin impacto.
Si el dolor afecta la calidad de vida, produciendo incapacidad de realizar actividades de la vida diaria, se recomienda una operación de prótesis de rodilla. Sin embargo, el especialista puntualizó que se debe de hacer una valoración previa a la operación para dar luz verde al proceso.
Esta operación consiste en remover la superficie desgastada en los huesos de la rodilla y colocar implantes de aleaciones metálicas y polietileno. La cirugía robótica monitorea en vivo la operación, logrando realizar cortes y medición de la laxitud de los ligamentos con mayor precisión.
Con esta novedad, las cirugías se hacen más precisas y menos invasivas, logrando un menor sangrando y mayor exactitud en la colocación de implantes. Igualmente, ofrece una mejor recuperación postoperatoria, permitiendo al paciente regresar a sus actividades diarias lo antes posible.
Después de la cirugía robótica, el paciente podrá caminar con andadera y, progresivamente, hacer otros movimientos hasta lograr subir y bajar escaleras los primeros días postoperación. El doctor explicó que la idea es mejorar la fuerza y movimiento para disminuir la inflamación y mejorar la recuperación.