Foto: Sergio F Cara (NotiPress)
La falta de formación especializada y evaluaciones inadecuadas continúa afectando el diagnóstico oportuno de niños con altas capacidades intelectuales. En entrevista para NotiPress, Alejandro Lara Muriedas, director académico del Centro de Desarrollo Integral para Sobredotados (CEDIS), afirmó: "Un mal diagnóstico implica o es lo mismo que arruinarle la vida a un niño".
Así, Lara precisó durante la conversación con la agencia de noticias que, en México, el reconocimiento de menores con altas capacidades ocurre tardíamente y en situaciones problemáticas. Comportamientos inquietos, preguntas constantes o dificultades para adaptarse a un entorno escolar tradicional suelen ser malinterpretados por docentes y profesionales de la salud mental. "Lo más probable es que incluso muchos psicólogos lo identifiquen como un niño con TDAH o con autismo" señaló.
Los especialistas consultados coinciden en señalar que uno de los principales riesgos de un diagnóstico incorrecto consiste en la administración de medicamentos no requeridos. Según Lara, estos menores no necesitan medicación para su desarrollo cognitivo ni emocional, sino un entorno educativo y social adaptado a sus características. Cuando el entorno educativo interpreta erróneamente su inquietud o sensibilidad, tiende a etiquetarlos como problemáticos, conduciendo a tratamientos inadecuados.
Además de las consecuencias médicas, un diagnóstico equivocado puede generar impactos emocionales duraderos. Según información especializada disponible, estos niños presentan con frecuencia una disincronía emocional, donde su desarrollo intelectual supera al emocional, lo cual dificulta su adaptación social y académica. Alba de Mingo, presidenta de la asociación EducaDe, aseguró, la falta de comprensión en el entorno escolar y familiar puede profundizar el aislamiento social. Asimismo, los expertos sugieren, el niño necesita un espacio donde sus intereses y habilidades sean comprendidos, evitando el estigma asociado a trastornos del neurodesarrollo que no presenta.
Tanto México como España trabajan actualmente en ampliar la capacitación docente. Según lo explicado por Lara y de Mingo, el conocimiento de los maestros es fundamental para identificar correctamente las señales de altas capacidades en el aula. La ausencia de protocolos educativos claros limita el acceso a diagnósticos precisos, manteniendo a estos menores en un estado de invisibilidad educativa.
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