Ciudad de México,
Martín Olivera
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Las personas que padecen apnea obstructiva del sueño presentan síntomas más graves cuando habitan en ciudades con mayores niveles de contaminación atmosférica, según reveló una investigación presentada en el Congreso de la Sociedad Respiratoria Europea celebrado en Ámsterdam, Países Bajos.
El estudio fue expuesto por Martino Pengo, profesor asociado de la Universidad de Milano-Bicocca y clínico del Istituto Auxologico Italiano IRCCS de Milán. El especialista declaró: "Sabemos que la AOS es más común en personas mayores o con sobrepeso, pero existe una creciente preocupación de que la contaminación atmosférica también pueda agravar la afección. Queríamos analizar esto a mayor escala, en varias ciudades europeas, para comprender mejor si la contaminación atmosférica afecta a la AOS y cómo".
Dicha investigación incluyó datos de 19.325 pacientes diagnosticados con apnea obstructiva del sueño en 25 ciudades de 14 países europeos, integrados en la Base de Datos Europea de Apnea del Sueño. Todos se sometieron a estudios de sueño y proporcionaron información sobre edad, sexo, índice de masa corporal y hábitos de consumo de tabaco.
Los resultados fueron combinados con mediciones de la concentración de partículas PM10, obtenidas del Servicio Europeo de Monitoreo Atmosférico de Copernicus. Estas partículas, con un diámetro de 10 micrómetros o menos, provienen principalmente de emisiones vehiculares y procesos industriales, representando un factor clave de contaminación ambiental.
De acuerdo al análisis, por cada incremento de PM10, aumentaba de manera medible el índice de apnea-hipopnea, indicador que refleja el número de interrupciones respiratorias por hora de sueño. Entre quienes presentaban un índice bajo, la media de partículas fue de 16 microgramos por metro cúbico, mientras que en pacientes con índices altos se registraron 19 microgramos.
Pengo afirmó: "Confirmamos una asociación positiva estadísticamente significativa entre la exposición promedio a largo plazo a la contaminación atmosférica, en concreto a las partículas finas conocidas como PM10, y la gravedad de la apnea obstructiva del sueño. Este efecto puede parecer pequeño a nivel individual, pero en poblaciones enteras puede llevar a muchas personas a categorías de mayor gravedad, lo que lo hace significativo desde una perspectiva de salud pública".
Las diferencias entre ciudades resultaron notables: en urbes como Lisboa, París y Atenas la relación fue particularmente fuerte, mientras que en otras no se observó el mismo nivel de asociación. Los investigadores consideran que factores locales como el clima, la naturaleza de la contaminación o las prácticas de diagnóstico pueden influir en estas variaciones regionales.
Sophia Schiza, directora del grupo de expertos sobre trastornos respiratorios del sueño de la Sociedad Respiratoria Europea, resaltó la importancia del hallazgo: "La apnea obstructiva del sueño es una afección común. Para las personas con AOS, especialmente para quienes viven en ciudades con altos niveles de contaminación atmosférica, este estudio es importante, ya que sugiere que la contaminación podría estar empeorando su afección".
Los investigadores señalaron que su objetivo es comprenderla razón por la cual los efectos no son homogéneos y si algunas personas son más vulnerables a los contaminantes. También plantearon la posibilidad de que una reducción de la contaminación atmosférica mejore los síntomas de la apnea obstructiva del sueño, reforzando la conexión entre la salud ambiental y la medicina del descanso.