Foto: CDC vía Unsplash
El pasado 2 de marzo de 2022, la Organización Mundial de la Salud advirtió que los desechos de antimicrobianos contenidos en fármacos podrían generar un desastre ecológico grave. En el comunicado, el organismo ha hecho un llamado mundial a dirigentes de todos los países con el fin de tomar cartas en el asunto lo antes posible. En todo caso, ¿cómo es que estos microbios pueden ocasionar un daño irreversible al medio ambiente?
Un antimicrobiano es un medicamento capaz de abatir y erradicar ciertos microorganismos al interior de un espécimen con vida. Específicamente, estos fármacos son utilizados para curar diversas enfermedades, afecciones o anomalías en animales, plantas y, por supuesto, en seres humanos.
La manera mediante la cual los antimicrobianos pueden generar un desastre ecológico es a partir de sus desechos. Estos últimos suelen llegar al exterior gracias a las aguas residuales, los desechos tóxicos, las escorrentías e inclusive, a partir de las aguas de tratamiento industrial.
Dicha situación provoca que los organismos farmacorresistentes interactúen de forma constante con otras bacterias. Ello no solo genera la resistencia de algunos virus a los antimicrobianos, también da pie al surgimiento de superbacterias peligrosas para todo ser vivo.
Actualmente, México cuenta con un acuerdo especial para la obligatoriedad de la Estrategia Nacional de Acción contra la Resistencia a los Antimicrobianos. En ella, se sugiere a diversos actores especializados en el sector salud pugnar a favor de un control detallado respecto a esta problemática.
Pese a esta clase de medidas, en México se generan nuevos contaminantes no reglamentados en aguas tratadas. Ese punto es relevante porque los antimicrobianos contenidos en el agua no pueden ser eliminados con facilidad debido a su estabilidad química. Así lo especifica un estudio publicado por la Universidad Nacional Autónoma de México en 2021.
Semejante situación puede devenir, entre otras cosas, en un daño directo a la vida marina y al resto de ecosistemas acuáticos, de acuerdo con la investigación antes citada. Además, esto repercute directamente sobre el ser humano, ya que al estar en contacto con dichos microbios, los tratamientos médicos pueden tener cada vez menos efectividad en su organismo.
Finalmente, es necesario que tanto empresas, como gobiernos en general, pongan especial atención en el manejo de desechos médicos con antimicrobianos. Esto con el objetivo de evitar una catástrofe regional o global en términos medioambientales, pero también en cuanto a la salud pública refiere.
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