Así se ha avanzado en el recorte de brecha salariar en fútbol femenil y varonil

Federación de fútbol de los Estados Unidos anunció que homologará los salarios de la selección femenil y varonil

Como en otras áreas laborales, el fútbol femenil se encuentra en condición de disparidad salarial con respecto al varonil; Estados Unidos avanza en el tema

La diferencia de salarios es una parte relevante de la discusión sobre las desigualdades entre hombres y mujeres en el mundo. Por ejemplo, las mujeres mexicanas ganan, en promedio, 75 pesos por cada 100 que gana un hombre, según el Instituto mexicano para la competitividad, con datos de 2017 hasta antes de la pandemia. Esta disparidad salarial abarca muchos campos profesionales, incluido el de los deportes, en particular el del fútbol. Pese a la creciente popularidad del fútbol femenil, la disparidad de salarios permanece, aunque en Estados Unidos se consiguió recientemente un avance importante en la materia.

El pasado 22 de febrero de 2022, la Federación de fútbol de los Estados Unidos emitió un comunicado donde mencionan que, dependiendo de la negociación de un nuevo convenio colectivo, habrán resuelto la larga disputa sobre la igualdad salarial en la federación. Diversos medios deportivos estadounidenses detallan, las jugadoras de la selección femenil se repartirán 22 millones de dólares, cantidad equivalente al salario conjunto de la selección varonil. Además, informan, recibirán 2 millones más para ayudar a las jugadoras retiradas del deporte profesional y para iniciativas benéficas relacionadas con la equidad en este deporte.

Al ocupar la selección femenil estadounidense la posición número uno del ranking mundial de fútbol femenil de la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA), esto supone un avance importante. Sin embargo, diversas estadísticas sugieren que aún queda trabajo por hacer para acabar con la disparidad salarial entre el fútbol femenil y varonil. Por ejemplo, mientras el premio acumulado de la FIFA para la Copa mundial femenina 2019 fue de 30 millones de dólares, para la Copa mundial masculina en 2018 fue de $400 millones. En México, por otro lado, el salario de una jugadora de primera división ronda en promedio los 3,700 pesos mensuales, mientras el de la liga varonil es de cerca de $750 mil, según el think tank Centro de Estudios Espinosa Yglesias.

Esta disparidad salarial y de oportunidades, aunado a la creciente popularidad del deporte en su rama femenil, ha propiciado diferentes demandas, algunas de las cuales comienzan a atenderse. En este sentido, la FIFA lanzó su Estrategia de Fútbol Femenino, para trabajar con las partes interesadas en la toma de medidas concretas para empoderar a niñas y mujeres en esta disciplina. Igualmente considera entre sus objetivos el hacer del fútbol un deporte para todos y luchar contra la discriminación de género.

Las metas de esta estrategia consideran aumentar el nivel de participación femenina en el fútbol mundial a 60 millones de jugadoras para 2026. También mejorar el valor comercial, dando forma a nuevas fuentes de ingresos y optimizando las existentes en torno a los eventos de fútbol femenil. Finalmente, se plantea construir los cimientos de un ecosistema de fútbol femenil más sofisticado, mientras se fomentan los roles de liderazgo de las mujeres para modernizar la gestión del juego.

Aunque aún quedan muchos retos por delante, el anuncio de la Federación de fútbol de los Estados Unidos significa un avance importante en materia de