Foto: Karollyne Hubert vía Unsplash
Conforme a algunos datos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la invasión a Ucrania causó profundas tasas de hambre en el país. Asimismo, el conflicto aumentará el riesgo de hambrunas en Rusia e incluso, puede causar un incremento global de la desnutrición.
La probabilidad de un aumento de la hambruna global por el conflicto alarma a las autoridades internacionales porque dichos países, son dos de los exportadores más relevantes de cereal en el mundo. De acuerdo a algunas estimaciones, para 2030 Estados Unidos, Brasil, Ucrania, Argentina y Rusia representarían cerca del 89 por ciento de la exportación de cereal. Así se especifica en la perspectiva agrícola de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Según el relator especial de la ONU sobre el derecho a la alimentación, Michael Fakhri, ciertos datos señalan que la seguridad alimentaria global está en juego. Esto porque el comercio agrícola mundial implicado tiene un valor de casi 1.8 billones de dólares.
En ese sentido, el conflicto entre Rusia y Ucrania ya habría provocado la migración de aproximadamente tres millones de personas. Así lo especifica la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), la cual también detalla que este tipo de individuos sufren un riesgo mayor de ser víctimas de trata.
Al momento, los efectos del conflicto relacionados con los alimentos tendrían repercusiones en el corto plazo para países como Egipto, Turquía, Bangladesh e Irán. Esto porque dichas naciones compran más del 60% de su trigo a Rusia y Ucrania. Asimismo, Líbano, Túnez, Yemen, Libia y Pakistán también dependen en gran medida de los dos países para su suministro de trigo. La temporada de siembra comienza pronto en algunas regiones europeas, por lo cual Michael Fakhri encuentra preocupante una guerra a largo plazo.
De igual modo, el especialista pidió a la comunidad internacional apoyar a las granjas familiares y a los pequeños agricultores en Ucrania. Y es que de acuerdo con el experto, estos sectores "están demostrando ser los más adaptables y resistentes en tiempos de crisis".
"Durante los últimos tres años, las tasas mundiales de hambre y hambruna han ido en aumento. Con la invasión rusa, ahora enfrentamos el riesgo de una hambruna inminente en más lugares del mundo", puntualizó Fakhri en el comunicado previamente citado.
De igual forma, el diplomático solicitó detener los ataques militares de Rusia en contra de Ucrania antes de que haya profundas consecuencias globales a largo plazo para la seguridad alimentaria de todos. Finalmente, Michael Fakri pidió a las naciones no convertir a la comida en arma, ello con el fin de no causar hambruna o desesperación.
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