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Con la pandemia de Covid-19 y las restricciones a la movilidad, las apps de citas tuvieron un auge como forma de socializar pese al confinamiento. En Estados Unidos, un 31% de usuarios encuestados en abril de 2020 declararon usar estas apps un poco más en comparación con antes de la pandemia, según Statista. En este contexto, también se ha popularizado entre jóvenes, sobre todo en la generación Z, una manera de iniciar relaciones románticas conocida como "hardballing", un concepto que vale la pena conocer este Día de San Valentín.
La idea del hardballing es ser sincero y directo con las intenciones y expectativas de inmediato, incluso antes de tener una primera cita. El objetivo principal del hardballing para muchos de la generación Z es evitar perder el tiempo con relaciones románticas indefinidas. Es decir, la persona que decide tomar esta postura opta por ser claro respecto a si quiere una relación duradera, algo casual o si prefiere alguna otra manera de relacionarse.
Algunas personas ven en el repunte del hardballing como tendencia un modo de tener seguridad y recuperar el control respecto a la forma de tener citas, principalmente ante el fenómeno del ghosting. Según la iniciativa por el uso seguro y saludable de internet Pantallas Amigas, el ghosting consiste en terminar una relación al cesar toda comunicación con la otra persona sin darle alguna explicación.
Pantallas Amigas explica que esta práctica puede tener consecuencias psicológicas muy negativas y un 65% de personas encuestadas reconocen haber desaparecido de una relación en algún momento de sus vidas. En la era del ghosting y de la incertidumbre por la pandemia, los jóvenes de la generación Z optan por la seguridad y claridad del enfoque del hardballing.
San Valentín siempre es un buen pretexto para revisar los temas relacionados con el amor y las relaciones románticas. Si bien el hardballing es una tendencia de los más jóvenes, como millennials o generación Z, existen otras tendencias regionales observadas con el auge de los sitios para encontrar pareja. Según un estudio de la aplicación #Dating, el 60% de solteros en México valora más la existencia de una afinidad que el atractivo físico al momento de escoger pareja.
Pese a la popularidad de estas plataformas, sobre todo en San Valentín, no están exentas de aspectos negativos. Esto sucede particularmente con comunidades minoritarias, como con personas LGBTIQ+, aunque las problemáticas también se relacionan con la raza y el racismo. Según una investigación del Instituto de Tecnología de Massachusetts, los peligros de estas aplicaciones para estas comunidades giran en torno a la filtración de datos y características de diseño discriminatorias.
Ya sea que se decida o no adoptar la postura de hardballing en este San Valentín, vale la pena recordar usar las apps de citas con responsabilidad y siguiendo los lineamientos de ciberseguridad para una mejor experiencia. Aunque sea la generación Z quien populariza estos términos, siempre es bueno conocerlos para nunca dejar de cuestionar las formas de relacionarse y sus implicaciones en la construcción actual de vínculos interpersonales
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